Mis Áreas
Ayuda

Aprendizaje continuo: el driver del éxito del negocio 🧠

por abatejulian1

En un mundo en constante cambio, globalizado y en un entorno VUCA (siglas en inglés de: volátil, incierto, complejo, ambiguo), el desafío de aprender es lo que nos hace progresar.

 

En el ámbito laboral el compromiso con el crecimiento y el desarrollo profesional es esencial.  Las industrias cambian, permanentemente surgen novedades que hacen cuestionar lo anterior; aparecen nuevas formas de hacer las cosas, nuevos gustos y preferencias por parte de usuarios y consumidores... Todo esto nos lleva a estar alerta, escuchar y aprender todo el tiempo, para ganar en proactividad, productividad y eficiencia.

 

La organización -a través de la alta dirección- debe estar convencida de que el aprendizaje continuo significa “capitalizarse en talento” para lograr el éxito en el negocio.  Los principales beneficios de promover una cultura de aprendizaje continuo son:

 

  • Mayor agilidad en la adaptación a nuevas situaciones.
  • Generación de ideas innovadoras.
  • Mayor preparación para afrontar demandas futuras.
  • Mejor respuesta a las necesidades de los clientes.
  • Mayor productividad.

Cuando la organización fomenta la capacitación y diseña planes de carrera para su gente, se percibe como un valioso estímulo que invita a asumir otras responsabilidades y aceptar nuevos desafíos, se logra mayor identificación y engagement por parte de los colaboradores.  Se trata de una cultura que genera:

 

  • Mayor compromiso de los equipos.
  • Talentos felices que eligen quedarse.
  • Negocios exitosos.

La oportunidad de aprender nuevos temas para sumar conocimientos y habilidades siempre es muy bienvenida, especialmente por los mejores talentos.  Principalmente después de la pandemia de COVID 19, en todo el planeta nos hemos acostumbrado a capacitarnos de forma virtual, con el ahorro de tiempos y costos que esto significa tanto para las empresas como para los colaboradores.

 

Existen excelentes herramientas de e-Learning que permiten acomodar espacios dentro del horario laboral, lo cual disminuye el estrés del talento que va a capacitarse, además, se siente reconocido -que la empresa invierte en él o ella- y con el compromiso de demostrar lo aprendido, eleva su autoestima y la confianza en sí mismo.

 

En la promoción de una cultura de aprendizaje continuo el área de RH tiene un rol clave, debe definir un modelo y determinar un plan de acción teniendo en cuenta ciertos aspectos esenciales:

 

  1. Elaborar un plan de aprendizaje: Un documento que explique la estrategia y las distintas actividades a desarrollar para la implementación de iniciativas de aprendizaje de los colaboradores.  Se debe establecer objetivos claros y asequibles, así como definir los procesos para alcanzarlos.
  2. Asignar recursos y tiempo al modelo de aprendizaje continuo: Especialmente al principio de este cambio de “cultura”, habrá que dedicar más tiempo y recursos, esto es, definir un equipo que se encargue del desarrollo del modelo y asignar un presupuesto tanto para generar y encaminar el modelo en general como para proveer efectivamente las capacitaciones a los colaboradores. 
  3. Asegurar la disponibilidad y la simplicidad de los contenidos: Éstos deben ser fáciles, accesibles, flexibles, por eso es recomendable utilizar herramientas de e-Learning, con la consecuente libertad de horarios para “tomar” o “recuperar” clases, según las obligaciones laborales y las prioridades del negocio.  Deben ser cursos de operación sencilla, intuitivos, atractivos, con reglas claras sobre los requisitos de asistencia/cursada y los requerimientos para evaluaciones y aprobaciones.
  4. Proponer contenidos relevantes: Los temas de las capacitaciones deben ser realmente importantes, mostrar que obtener ciertas habilidades significa un salto cualitativo en la carrera del colaborador dentro de la organización (promociones de puesto, aumento de salario, sumar puntos para el bonus, etc.); esto promoverá el interés y contribuirá para obtener mayores niveles de performance.
  5. Fomentar el microaprendizaje: Las capacitaciones no necesariamente tienen que plantearse como cursos de semestres o años; se pueden ofrecer módulos cortos con la administración de conocimientos bien precisos sobre diversas materias con cierta correlatividad, lo que permite un avance -planeado- en el entendimiento (más sofisticado) de temas variados que contribuyen a comprender mejor el negocio, el mercado, la competencia, así como conocer lo que quiere el cliente, etc.

Más allá del país o la industria en la que nos desempeñemos, todo cambia -y cada vez de forma más acelerada.  Los equipos deben estar preparados para transitar y adaptarse a esos cambios, a nuevas tecnologías, nuevos mercados, a los nuevos requerimientos de las jóvenes generaciones de clientes y usuarios.  El aprendizaje continuo es fundamental en el tercer milenio, los talentos deben estar permanentemente actualizados para dar su mejor versión y contribuir al éxito del negocio.

 

“Lo único constante es el cambio”

(Heráclito de Éfeso – siglo VI a.C)

No te pierdas las últimas novedades

Suscríbete y recibe notificaciones en tu corre electrónico. Elije "Suscribirse" en el menú de opciones de la parte superior derecha.

Conoce más aquí